La Muestra de Cine Europeo de Lanzarote presenta el 3 de marzo, a las 20:30h la tercera película de su Ciclo Mensual. En esta ocasión se ha hecho un cambio en la programación y se proyectará Policía, adjetivo, del rumano Corneliu Porumboiu, premiada en la categoría Una cierta mirada del Festival de Cannes, en colaboración con el Instituto Cultural Rumano de Madrid. Marco Arrocha y Juan Rafael Martínez realizarán una breve presentación de la película.
Al finalizar: informal coloquio entre los asistentes moderado por el director de la Muestra, Javier Tolentino.
Lugar: El Sol - espacio ubicado junto al Arrecife Gran Hotel, Lanzarote.
Entrada libre, aforo limitado.
Poliţist, Adjectiv (Policía, adjetivo)
Corneliu Porumboiu
Rumanía, 2009, DVD VOSE, 115min.
Guión: Corneliu Porumboiu
Fotografía: Marius Panduru
Montaje: Roxana Szel
Sonido: Alexandru Dragomir, Sebastian Zsemlye
Reparto: Dragos Bucur, Vlad Ivanov, Ioana Stoica, Irina Saulescu
A lo largo de 115 minutos, el film nos conducirá a través de una sociedad asfixiada por su régimen policial. Nos situamos en la periferia de una gran ciudad: la fría, gris y cuadriculada Bucarest. En los alrededores de un instituto, un chico vende hachis a sus compañeros. La pena por portar sustancias ilegales puede alcanzar hasta los 8 años de prisión. Un policía le sigue la´pista, investiga y obtiene una información que le provoca un grave conflicto moral: ¿debe seguir lo que dicta su conciencia, o lo que dice el procedimiento policial? (por Javier Tolentino).
Al finalizar: informal coloquio entre los asistentes moderado por el director de la Muestra, Javier Tolentino.
Lugar: El Sol - espacio ubicado junto al Arrecife Gran Hotel, Lanzarote.
Entrada libre, aforo limitado.
Poliţist, Adjectiv (Policía, adjetivo)
Corneliu Porumboiu
Rumanía, 2009, DVD VOSE, 115min.
Guión: Corneliu Porumboiu
Fotografía: Marius Panduru
Montaje: Roxana Szel
Sonido: Alexandru Dragomir, Sebastian Zsemlye
Reparto: Dragos Bucur, Vlad Ivanov, Ioana Stoica, Irina Saulescu
A lo largo de 115 minutos, el film nos conducirá a través de una sociedad asfixiada por su régimen policial. Nos situamos en la periferia de una gran ciudad: la fría, gris y cuadriculada Bucarest. En los alrededores de un instituto, un chico vende hachis a sus compañeros. La pena por portar sustancias ilegales puede alcanzar hasta los 8 años de prisión. Un policía le sigue la´pista, investiga y obtiene una información que le provoca un grave conflicto moral: ¿debe seguir lo que dicta su conciencia, o lo que dice el procedimiento policial? (por Javier Tolentino).
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